El problema del desborde de aguas servidas, es uno de muchos problemas que heredamos de nuestra empresa promotora, que hace ya varios años brilla por su ausencia en el residencial.
Si bien el pasado sábado 8 de mayo, el camión Vactor del IDAAN, le prestó una valiosa colaboración a la barriada, destapando los acueductos obstruidos antes del puente, tal parece que dicho trabajo ha sido insuficiente debido a que la totalidad de las plantas de tratamiento del residencial están colapsadas y no se le da ningún tipo de mantenimiento en la actualidad.
Viendo los comentarios de los residentes en redes sociales, puedo de manera muy general, identificar ciertas posturas para afrontar esta bomba de salud pública que nos dejo la empresa en la que confiamos, al adquirir nuestra vivienda.
En primer lugar veo que algunos vecinos, desde hace ya mucho tiempo, enfatizan la necesidad de asumir la totalidad del costo de reparación y mantenimiento de las plantas de tratamiento del Edén por parte de los residentes; y si entiendo bien su postura, no solo las plantas de tratamiento, sino la limpieza de áreas comunes, limpieza de tanques de abastecimiento, mantenimiento de parques, reparación de muros colapsados y construcción de la cerca perimetral, que la promotora nunca concluyó, entre otras muchas cosas pendientes.
Una postura un poco menos radical del planteamiento anterior, es los vecinos que solo quieren que se financie por parte de los residentes, las cosas inmediatas que les preocupan, como por ejemplo, plantas de tratamiento y mantenimiento de áreas comunes.
Al consultarse-les, porque piensan que los residentes deben asumir todos los costos que debería llevar la promotora, mientras mantenga la titularidad de la barriada, enfáticamente contestan:
«Porque la promotora, ya no está.»
Pareciera que con esta frase, pretendieran justificar que los residentes estuvieran de alguna forma, obligados a asumir estos costos. Esta postura es casi como si consideraran que la barriada es una especie de PH.
En el otro extremo, están los residentes que parecieran permanecer en un estado de completa indiferencia con respecto a problemas tan sensitivos como el desborde de aguas servidas y la falta de agua potable; no participan en ninguna actividad, nunca se detienen a ver que pasa, y nunca se les ve ningún tipo de apoyo en una causa común, como la que comentamos en el día de hoy. Su actitud pareciera que le grita a todos los demás:
«No tengo tiempo para eso, yo me encuentro muy ocupado, alguien tendrá que arreglar eso en algún momento»
Volviendo a la primera propuesta de solución, la misma tomó mucha fuerza hace unos años atrás, sobre todo cuando algunos residentes retomaron la idea de una asociación, que había surgido al inicio de la barriada.
Han pasado los años y la noción de que los residentes debían asumir los costos de todo lo que falta en la barriada, quedo en la plataforma de lanzamiento, para nunca despegar. Y no despegó, desde mi punto de vista, por la cantidad de cosas que había que cubrir y por los costos exorbitantes que se plantearon, aparte que nadie firmo como propietario en un PH, por lo que no se podía obligar a ningún residente a pagar.
En la actualidad aún la posición mas mesurada de esta postura, pasa por muchos problemas, por ejemplo una cosa tan necesaria como tratar de darle mantenimiento a una de las plantas de tratamiento, lucha por conseguir los fondos mínimos para realizar esta tarea, sin decir de una propuesta que hubo para rehabilitar la planta de tratamiento número #4, que requería de equipo especial para su funcionamiento, después de años de estar detenida.
Lo que algunos parece no querer darse cuenta, es que:
«El costo de rehabilitación y mantenimiento de las plantas de tratamiento del Edén, es extremadamente elevado para los residentes y bajo las actuales circunstancias, no es sostenible en el tiempo, sin ayuda externa.»
En la postura de no hacer nada y que otro se encargue, los residentes que piensan de esta forma, permanecerán indiferentes, pienso yo, hasta que se vean afectados directamente, entonces correrán a buscar y exigir soluciones y apoyo (ironía de la vida), siendo que las soluciones pueden ser mas costosas para ellos, que si se hubieran decidido a apoyar cuando los problemas eran mas manejables. Cuando hablo de costos, no solo hablo de costos económicos, sino también en cuanto a salud y paz mental.
Una tercera solución, es poner los pies sobre la tierra e identificar los momentos económicos por los que pasan los residentes en la actualidad, agravados por toda la crisis actual en cuanto a la pandemia.
Definitivamente que las soluciones a los problemas del Edén, deberán pasar necesariamente por una mancuerna estado-residentes, posición que poco a poco se van imponiendo en el tiempo. Creo que se ha podido demostrar con los años, que cuando algunos vecinos se han decido a solicitar ayuda para los problemas del residencial, se han podido conseguir en un tiempo aceptable.
Algunos dirán que solo se consiguen paliativos, cierto; pero al final del día, respuestas que permiten que el sistema se mantenga andando y no colapse.
Es importante recordar que la mayoría de los residentes, ya aportamos al estado con nuestros impuestos, por lo que:
«Si las ayudas básicas y recurrentes que se pueden conseguir con el estado, las complementamos con el aporte de los residentes a través de propuestas económicas puntuales y bien llevadas, podríamos mantener la infraestructura crucial del residencial funcionando, sin cargas económicas excesivas para el residente».
Sin temor a equivocarme, considero que muchos residentes, ven esta opción como la mas viable en vista de las circunstancias actuales. También considero que este tipo de soluciones, requerirán de nuevos residentes que puedan liderar con un metodología distinta, dejando atrás soluciones que no han funcionado en el tiempo.
Para terminar un punto importante para todos los vecinos, es que no solo se trata de aportes económicos, sino también de voluntades. Por ejemplo, personal del IDAAN, al destapar la alcantarilla colapsada, se encontró que había mucha grasa acumulada en la misma lo cual se puede ver en la siguiente imagen.
Es necesario que los residentes tomemos conciencia, en no arrojar al desagüe elementos como grasa u otras materiales, que contribuyan con el taponamiento del sistema de alcantarillado y plantas de tratamiento.
No todo es negativo, existen proyectos en marcha como saneamiento de Panamá Oeste, que por cierto, algunos residentes indican, que estuvieron por la barriada, semanas atrás. En el siguiente enlace una nota que escribimos en el 2019 sobre este proyecto.
Residentes ¿ya visitaron el proyecto Saneamiento de Panamá Oeste en Westland Mall?